La tonelería Vicard celebra 100 años de excelencia y recibe el sello «Entreprise du Patrimoine Vivant»
Con motivo de su centenario, la Tonelería Vicard ha recibido el sello «Entreprise du Patrimoine Vivant» (EPV), uniéndose así al exclusivo círculo de empresas francesas reconocidas por su excepcional artesanía. Esta distinción destaca un siglo de experiencia en la fabricación de barricas, tanques y toneles, y subraya el compromiso de la empresa con la preservación de las tradiciones, a la vez que continúa su proceso de innovación.
Un legado de seis generaciones
La historia de la tonelería Vicard se remonta a 1925, cuando Paul Vicard se unió a la tonelería familiar dirigida por su suegro, Armand Bourdaraud, en Cognac.
La empresa se convirtió oficialmente en Bourdaraud & Vicard en 1950 y más tarde en Vicard Père et Fils en 1968, cuando Paul se asoció con su hijo Jean Vicard, Meilleur Ouvrier de France 1965. Hoy, dirigida por Jean-Charles Vicard, que representa la sexta generación, la empresa se mantiene fiel a su herencia mientras continúa creciendo.
“Recibir esta distinción es un gran honor, ya que resalta nuestra artesanía multigeneracional y subraya las iniciativas que estamos emprendiendo hoy para fusionar tradición e innovación”, afirma el dirigente.
Un fuerte compromiso con la innovación y la RSE
La Tonelería Vicard también se distingue por su espíritu innovador y su compromiso con la Responsabilidad Social Corporativa (RSC). Durante casi 30 años, la empresa ha implementado acciones concretas para reducir su impacto ambiental, garantizar el bienestar de sus toneleros y contribuir activamente al desarrollo local. Estos esfuerzos han sido recompensados con una medalla de bronce de ECOVADIS y, hoy en día, con el sello EPV.
«Esto es solo el principio», afirma Jean-Charles Vicard. Con su tradición centenaria, la Tonelería Vicard mira con confianza al futuro, lista para innovar y afrontar los retos del mañana, manteniendo su liderazgo en la industria tonelera.

Sobrelías Redacción
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