Maridaje barbacoa de vinos de Bodega Vallegarcía y Carne de La Finca
¡Buenos días lectores! Hoy os acerco una propuesta de maridaje para una barbacoa otoñal de la mano de vinos de Bodega Vallegarcía y y carnes de la firma Carne de La Finca.
Las carnes que se van a degustar, vienen de la mano de la empresa “La Finca” como os comentaba. Una compañía que basa la calidad de sus productos en el bienestar animal y el buen hacer del medio rural.
Los vinos con los que se van a acompañar estos productos, son: ”Vallegarcia Syrah 2020” e “Hipperia 2019” de Bodega Vallegarcía. Una bodega que se caracteriza por la elaboración de vinos de calidad, elegancia y equilibrio, respetando al máximo la tipicidad de cada viñedo y la expresión del terroir.
Las piezas de carne que se van a degustar son las del cómodo “Pack Barbacoa” que podréis encontrar en la web de La Finca: Chuleta de Dehesa (1kg), pieza de entraña (500g), dos burguers ProEdition + dos brioche, y por último chorizo criollo (400g).
La barbacoa se empezó con la entraña, aprovechando el potente calor inicial para “sellar” y dejar crujiente la fina capa que mantiene la pieza de grasa. En este caso, el acompañamiento de realizó con el Syrah 2020 después de 10 minutos abiertos.
La uva Syrah por lo general, es una variedad de acidez equilibrada, tanino suave, floral en boca y con notas de fruta negra y ahumados. Marida muy bien con las carnes rojas como la de vacuno, ya que son carnes no especialmente grasas, que no necesitan de vinos de acidez o tanicidad altas que ayuden a limpiar o refrescar la boca. Es el caso de la entraña y la Syrah lo que se consigue es potenciar esa sensación de armonía de sabores, mientras se potencian los ahumados y los tostados que nos da la barbacoa y el varietal
La carne quedó al punto, tierna y jugosa, y permitió disfrutar al máximo del Vallegarcía Syrah 2020, que mantenía una buena relación de tanicidad, cuerpo y notas golosas propias de la variedad. El maridaje unía bien las sensaciones y texturas de ambos productos, realzando las cualidades organolépticas.
En segundo lugar se decidió optar por hacer la chuleta. En este caso se pasó 11 minutos por cada lado y se selló muy cerca del fuego, al final del proceso, para aportar ese punto tan característico que debe tener la ternera en las barbacoas. Se cubrió con papel aluminio, y se esperaron 7 minutos de reposo para que no pierda jugosidad antes de partirlo.
Para esta carne se ofreció el Hipperia 2019, el gran vino de la bodega Pago Vallegarcia, un vino con elegancia, delicadez y fina esencia con un carácter y un estilo propio. , con 20 minutos abierto, buscando oxigenar el vino, y permitiendo “liberar” todos los aromas que esconde. Se buscó específicamente este vino, ya que tiene una carga tánica más potente, un perfil de fruta negra más intenso y es más complejo. El ensamblaje nace del equilibrio entre la Cabernet Sauvignon y Merlot, así como la suma de la elegante Cabernet Franc y la potente Petit Verdot; Un coupage cuyas variedades son conocidas de ser amigas fieles de las carnes.
Pasamos ahora a las hamburguesas. En este punto, y buscando realzar y no disimular la gran calidad de la carne y los brioche, se optó por una presentación austera con: pan, carne y queso fundido. Y la verdad, no se requería más. Los panecillos se tostaron en la barbacoa para aportar un punto ahumado y crujiente, mientras que la carne estuvo 7 minutos por cada lado.
En esta ocasión, la decisión del maridaje se fue a por el Syrah 2020, esperando una combinación perfecta de vino goloso con la textura de la carne picada de la hamburguesa.
Por último, se va a probar el chorizo criollo con el Hiperia 2019, buscando un contrapunto a las notas especiadas y grasas del propio chorizo.
La presentación entraba por los ojos, y se propuso una salsa chimichurri para montar los “minibocadillos” del chorizo. En este caso la combinación con el vino fue un gran acierto, y permitió finalizar con un gran y agradable sabor de boca.
En el caso de querer emular este excepcional maridaje, se pueden encontrar los productos en las tiendas on-line de Bodega Vallegarcía y La Finca.

Jaime Salinas Loaisa
Técnico en laboratorio y producción vinícola.
En mis ratos libres ejerzo de sumiller.
Fanático de la gastronomía y la enología.
En constante aprendizaje.