Yugo Blanco Airen 2018 y Yugo Tinto 2018
Yugo Blanco Airen 2018 y Yugo Tinto 2018 son dos vinos jóvenes que he podido catar elaborados por Bodegas Cristo de la Vega al amparo de la DO La Mancha.
Ambos vinos son dos de los vinos jóvenes que elabora esta bodega, vinos sin crianza que buscan en todo momento la frescura de la fruta y de la varietal y conseguir vinos de fácil beber e ideales para cualquier momento, en mi opinión, algo que consiguen a la perfección.
Yugo Blanco Airen 2018, es un monovarietal Airén, vino joven y fresco que en vista nos deja en copa parada un vino de color dorado pálido, de intensidad cromática media, que se muestra muy limpio y brillante en copa parada que al moverla nos muestra una abundante lágrima.
La nariz es muy varietal, con una cantidad de aromas afrutados muy perceptibles, con toques a plátanos por ejemplo y a otras frutas tropicales como a piña. El fondo es mineral y mantiene un buen equilibrio.
La boca es la que se espera en un vino de estas características, fresca y afrutada de entrada y de paso, con una buena acidez que le da buena persistencia, con un paso bastante redondo y elegante. El postgusto vuelve con mucha fruta.
En mi opinión, un vino que se merece en estos momentos una puntuación de 88 puntos.
Yugo Tinto 2018, es también un vino joven, sin crianza, pero en este caso no es monovarietal, sino que está elaborado con 70% Tempranillo, 15% Syrah y 15% Merlot.
Un vino joven en el que la fruta y la acidez van de la mano para darle una buena persistencia en su cata. Su coupage le da cierto grado de complejidad con una combinación de diferentes frutas.
En su cata este Yugo Tinto es un vino que nos deja un color rojo picota, muy limpio y con una capa alta, de buena intensidad en vista.
La nariz está llena de fruta, con una buena intensidad, destacando de primeras aromas a fruta roja, con ligeros toques a fruta madura, fruto del coupage y con un fondo mineral.
La entrada en boca de este vino es fresca, con mucha fruta como ya os decía, y la acidez le da una buena persistencia. Un recuerdo medianamente largo y un postgusto con mucha fruta de nuevo.
En mi opinión, un vino fresco y joven, que responde perfectamente a las expectativas que genera con lo que se merece en estos momentos una puntuación de 88+ puntos.

José Luis del Campo
José Luis del Campo. Sumiller. Asesor online de bodegas. CEO en Socialmedia Network.