Ochoa Corazón de Finca Montijo 2014
Dentro de la sección de vinos catados en este 2021 que hay que probar, hoy os queremos acercar este, Ochoa Corazón de Finca Montijo 2014, un vino que pertenece a la Serie Familia que elabora Bodegas Ochoa de una parcela próxima a la bodega, Finca Montijo, en Olite, en la que se emplean las viñas más viejas que tienen en propiedad.
Un vino que muestra a la perfección el amor por la viña, el respeto por la tradición viticultora de esta bodega familiar y, como muestra, es un vino que se elabora en honor a Javier Ochoa, como promotor junto a su esposa de esta bodega como la conocemos actualmente.
Lo pudimos catar en su día ya hace unos cuantos meses y nos pareció excelente. Ahora, con un tiempo ya en botella, se han confirmado las sensaciones que nos dio en su momento: un excelente vino, con gran potencial de guarda y que iba a crecer en la botella.
Y así ha sido. Hemos podido volver a catarlo y se convierte en uno de los vinos indispensables para las próximas mesas navideñas que hemos catado a lo largo de 2021, por su personalidad, su carácter, una perfecta tipicidad del terroir navarro y un reflejo excelente de lo que es la Merlot en los vinos españoles.
Un vino realmente personal, de carácter, representativo de la tipicidad del terruño de Olite, y con un coupage realmente interesante ya que nos presenta un 90% de Merlot y un 10% de Cabernet Sauvignon. Si le añadimos que la añada del 2014 fue muy ‘peligrosa’ en España con zonas de muchas lluvias así como condiciones climatológicas adversas puntuales, el elaborar este vino tiene aun más mérito.
Viñas más viejas de la bodega con muy bajos rendimientos, lo que le da un carácter y mucha tipicidad de los suelos. Crianza de 12 meses en barricas de roble francés y americano y posterior paso afinándose en botellero para conseguir el momento óptimo.
En la fase visual este Ochoa Corazón de Finca Montijo 2014, es un vino que ‘encandila, nos deja un color rojo cereza muy intenso, con una capa media no demasiado intensa y que, en movimiento, deja entrever algunos reflejos color teja. Sin duda un vino que transmite crianza y elegancia.
Nariz compleja, de intensidad bastante alta, con clara presencia a fruta madura. Al airear la copa se intensifica esta, aparecen aportes florales suaves y entra la sutileza del paso por barrica , con presencia de tostados, ligeras especias dulces, algunos balsámicos, aportes aceitunados, algo de ahumados, muy complejo y equilibrado. Su estancia en botella le ha dado más complejidad aun que cuando lo catamos hace unos meses.
Ataque en boca con carácter pero con frescura. Vino de muy buena estructura, capacidad de guarda y elegancia, por algo hablamos de un vino de 2014. Buen volumen en el paladar que llena completamente la boca, con un tanino presente muy trabajado y con un amargor final realmente rico. Mucha persistencia y y un final realmente largo.
Una de nuestras recomendaciones para los amantes de los vinos tintos con crianza, diferente de los habituales Tempranillo, con carácter y personalidad. Ha mejorado en botella estos últimos meses y le permite seguir con la calificación de Excelente pero en este caso con con una puntuación de 93+ puntos.

José Luis del Campo
José Luis del Campo. Sumiller. Asesor online de bodegas. CEO en Socialmedia Network.