Este vino Pago de Carraovejas Finca y Bodega 2015, cuya cata os acerco hoy, es el fruto de un cambio en esta bodega de Ribera del Duero en cuanto a que une los criterios de meses de crianza entre crianzas y reservas, con lo cual era un vino muy esperado que quería catar. Además, esta añada ya lleva un tiempo en el mercado con lo cual se puede comprobar la evolución en botella. Desde esta añada los vinos de crianza de Pago de Carraovejas pasan a tener 12 meses de barrica, con diferentes tonelerías y antigüedad de las barricas.
Si hablamos en términos de calidad, este vino es excelente sin duda alguna. Mayoritariamente Tempranillo con un 6% de Cabernet Sauvignon y un 4% de Merlot. Disfrutaréis su cata sin duda alguna. Un vino que representa a la perfección la crianza de los ‘ribera’, una imagen perfecta del terruño de esta zona. Si véis la graduación que es de 15º, puede que esperéis una cata de un vino potente, difícil de analizar, pero luego os encontráis con un vino completamente diferente.
Su graduación no se traslada al vino para nada en ningún momento de la cata, además de aparecer una justa acidez que le permite tener una muy buena persistencia, un paso por boca largo y una buena guarda durante bastantes años.
En vista nos deja un color cereza bastante intenso, con mucha brillantez y limpieza.
Una nariz con una excelente intensidad y una gran nitidez, que nos acerca aromas a fruta nada más acercarnos a la copa, sobre todo fruta roja. Lo curioso de este vino es que al mismo nivel de intensidad que los aromas frutales, nos encontramos los aromas florales, perfectamente equilibrados entre ellos y con los aportes procedentes de la barrica, con unos excelentes tostados, toques ahumados, a pimienta, … Un toque final en nariz a cremosidad que deja una nariz impecable.
Podíamos esperar una entrada en boca muy potente dada su graduación, pero para nada. Incluso por momentos tiene una entrada fresca. El paso por el paladar es una conjunción de fruta y toques especiados, que nos dejan un vino muy redondo y bien estructurado, con los taninos muy finos. Elegante, sabroso en el paladar, le ayuda muchísimo la perfecta gestión de la acidez que estando presente le ayuda muchísimo en la cata.
Un vino excelente sin lugar a dudas, con un solo defecto, el precio, ya que es un vino que ronda los 30 euros. Podría pareceros caro, pero si evaluamos la RCP (relación calidad precio) es un muy buen vino. Por desgracia no lo podemos consumir a diario, quien nos diera, pero si es un vino perfecto para determinadas situaciones en las que buscamos un vino con un valor añadido alto.
José Luis del Campo
CEOenSocialmedia Network
José Luis del Campo. Sumiller. Asesor online de bodegas. CEO en Socialmedia Network.