12 Lunas Tinto 2016
12 Lunas Tinto 2016, de Bodega El Grillo y La Luna, al amparo de la D.O. Somontano.
Coupage de cuatro variedades Tempranillo, Garnacha, Cabernet Sauvignon y Syrah que le confieren ciertamente un visual atractivo. Un vino que en su cata en vista nos deja un color rojo picota brillante de capa media, atractivos ribetes anaranjados que denotan a las claras su paso por barrica (9 meses).
En nariz es bastante franco, aun sin inicialmente ser muy expresivo (recomiendo airearlo correctamente). Aparece de inmediato así mucha fruta roja con un fondo de frutos negros licorosos, pimienta y bálsamos de eucalipto, también se muestra la vainilla de la madera junto con una regaliz algo oculta. A cada vuelta de copa aparecerán progresivamente mas aromas y matices, así que tomaros vuestro tiempo con el reposo en copa, y vuestra percepción al olfato os lo agradecerá. Su paso por barrica muy posiblemente sea de 2º o 3º uso, en ningún caso nueva, es quizás por eso le cueste un poco inicialmente expresarse, aunque cuando lo hace consigue un conjunto francamente completo e integrado.
En boca ya es algo más tímido, menos voluptuoso pero para nada cobarde. Su entrada es suave y fresca, frutas rojas y negras de amplio carácter acompañadas de regaliz y mentol, la acidez es suave al igual que los taninos. Ancho y expresivo, pero de corta estancia en boca, lejos de perjudicarle le favorece dando paso a otros mas siguientes tragos para seguir degustándolo.
En general este 12 Lunas Tinto 2016 es un vino que en la actualidad se deja beber muy bien, yo recomiendo hacerlo en una copa ancha, ya que las cualidades que en nariz y en boca ofrece se aprecian mejor. También una decantación previa le va cómo anillo al dedo, aunque ojo, que este vino el año que viene quizás se redondee un poco mas… así que esa segunda botella una vez probado, es casi obligatoria para los que gozamos de un armonioso y logrado conjunto.
Un vino que merece la calificación de Muy Bueno llegando a una puntuación de 90+ puntos.

Frank Deveraux
Enógrafo, sumiller, enófilo, pero ante todo, amante del vino, siempre aprendiendo. Disfrutando de cualquier vino en un momento especial.